En la clase de hoy se dio a conocer un sistema de evaluación de almuerzos dentro del jardín, con la cual se hizo una actividad en la que en grupos se debían evaluar algunos tipos de alimentos según nuestro criterio y así poder situarnos en diferentes posibles comidas para los niños.
1.- ¿Cuán diferente era el nivel de acuerdo entre la primera y la segunda vuelta?
En la primera vuelta se pudo ver una distancia grande entre los rangos de notas que le poníamos a las comidas, ya que ninguna evaluó con un criterio en común sino que se evaluó sólo con el conocimiento propio y con lo que cada uno creía que fuera un alimento apto para el niño. A diferencia de la segunda vuelta, que a partir de una conversación grupal y después de poner un criterio de evaluación, se pudo observar un cambio en los resultados, pues las diferencias de notas que existían entre un grupo y otro eran mas estrechas.
2.- ¿Qué temas se sintieron más subjetivos o eran difíciles de acordar?
El tema más complejo de acordar fue poder compartir el mismo estándar de evaluación, ya que algunas pensaban que
una comida era apta para el niño, mientras otra persona pensaba completamente
lo contrario.
3.- ¿Cómo se negociaron los temas más subjetivos?
Los temas más subjetivos se pudieron
llegar a un acuerdo en forma grupal, al ir conversando y compartiendo nuestras
ideas, es decir, se hizo una pequeña discusión de los temas a evaluar y nos
quedamos con las ideas que más se repetían. Al tener varias opiniones y la
mayoría eran similares, se llegó a un acuerdo con poca dificultad.
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